90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (2024)

Guillermo Rodríguez (35 años) espera la llegada del autobús para ir a Madrid. Se mudó hace menos de un mes a Brea de Tajo, donde vive en la casa que le dejó su abuelo, en las afuera del pueblo. Trabaja como artesano: anuncia en internet y espera que alguien le encargue la construcción de un mueble o la reparación de una mesa inestable. “Me va regular. Por eso me vine a vivir aquí. En Madrid estaba en la calle, en Brea por lo menos tengo un techo”, explica el artesano. A 90 kilómetros de distancia, en Pozuelo de Alarcón, Susana Cañil sale de una tienda de productos de maquillaje en un centro comercial. A pesar de que es la media mañana del viernes, ella, que se ocupa de organizar conciertos en el extranjero, no tiene prisa. “Me lo puedo tomar con calma. Después de muchos años de trabajo, lo tengo más que merecido”.

Rodríguez y Cañil tienen poco en común, al menos en el aspecto económico. Viven en las antípodas del bienestar. Los municipios donde están empadronados, Brea de Tajo y Pozuelo de Alarcón, son respectivamente los que disponen de la renta media por hogar más baja (21.885 euros) y más alta (82.973) de la Comunidad de Madrid. Las cifras se extraen del informe sobre la pobreza en la región elaborado por CCOO, hecho público esta semana, que alerta sobre los riesgos de exclusión en un territorio donde, según explica el documento, la “brecha social y económica es cada vez mayor y más evidente”.

Ambos municipios están gobernados por el Partido Popular. Pese a esa coincidencia, les separan abismos. Mientras Pozuelo se encuentra al lado de la capital, separado solamente por la Casa de Campo y conectado con diferentes líneas de autobús y trenes, Brea está casi en la frontera con Castilla- La Mancha. La primera forma parte de las quince ciudades más pobladas de la región (87.134 empadronados en 2021, según el INE), y la segunda no supera el medio millar.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (1)

“Aquí se vive bien, es todo muy tranquilo. La gente te saluda y es amigable”, asegura Rodríguez. Acaba de salir de una de las dos tiendas de alimentación del pueblo. Ha comprado su almuerzo: un paquete de jamón de pavo y una barra de pan. Se mueve en una bicicleta, la carga consigo incluso en el autobús hacia Madrid para ir a trabajar. Reconoce que le gustaría vivir en un lugar con un poco más de vida, pero que por ahora pagarse un alquiler en una ciudad grande le resulta imposible.

Mireya (52 años) y Daniel (47) también viven en Brea por necesidad. Antes del 2008 vivían en Belmonte del Tajo, un municipio con el triple de habitantes que Brea. Con la crisis perdieron la casa y el trabajo, y tuvieron que buscar una alternativa. Se mudaron a su actual vivienda, donde viven de alquiler. Afirman que no consiguen integrarse con los habitantes históricos del municipio, a pesar de haberse mudado hace casi una década. “No hacemos mucha vida en el pueblo. Son todos primos o hermanos, hijos de gente que vive aquí desde siempre. Te tratan de forma diferente por haber llegado después”, reconoce Mireya.

A Madrid, en “el jornalero”

Antes de prejubilarse por problemas de salud, era enfermera. Su marido, Daniel, trabaja de albañil en Madrid. Todos los días se despierta temprano para coger “el jornalero”, el autobús de las 5.30 horas que los habitantes de Brea llaman así porque lleva a los trabajadores a la capital. Comparte la ruta de hora y media con sus dos hijas hasta la estación de Atocha. Ellas estudian Arquitectura y Derecho, y la familia no se puede permitir pagar un alquiler en Madrid para que puedan vivir más cerca de la universidad. “Son muy listas”, afirma Daniel, que cuando habla de las hijas se llena de orgullo. “Seguro que en cuanto se gradúen y empiecen a trabajar, se irán de aquí”.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (2)

La vida del pueblo se desarrolla alrededor de la calle Mayor, que recorre Brea de este a oeste. Allí están todos los servicios de la localidad: la única farmacia, el centro de salud, la tienda de alimentación, los cuatro bares que con sus copas de vino amenizan el día de los numerosos vecinos jubilados, y el colegio rural, que agrupa en las aulas a niños de diferentes edades. También se pueden encontrar detalles que cuentan algo de la historia contemporánea de Brea, como la escultura en hierro del Gordo de la Lotería de Navidad que cayó en 2016 y benefició a muy pocas personas, o el contenedor de vidrio diseñado por Ágatha Ruiz de la Prada, ilustre vecina breana.

Brea de Tajo cuenta con 523 empadronados aunque las personas que andan por el pueblo aseguran que la cifra no refleja la verdadera situación. Según ellos, a diario en Brea viven unas 300 personas y es solamente en los fines de semana o durante las fiestas y vacaciones de verano cuando los vecinos fantasma vuelven a casa. De hecho, algunos afirman que incluso su alcalde –el popular Rafael Barcala Gómez, que lidera el Ayuntamiento desde 1999– vive en Madrid, y recorre todos los días los 57 kilómetros que le separan para llegar al trabajo.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (3)

“Se vive con poco, pero se vive bien”, garantiza Pedro Díaz Sanchestrillo, pensionista de 84 años. Vive solo y cobra una pensión por debajo de los 1.000 euros, pero afirma que gracias a Cáritas no tiene problemas para llegar a fin de mes. Pasa todas las mañanas con su cuadrilla en la plaza del Ayuntamiento. Bajo una pancarta que recuerda la visita de los reyes en diciembre de 2020 para inaugurar el centro de mayores, Díaz y sus amigos hablan de las dificultades de vivir aislados.

“La situación ha mejorado mucho. Ahora tenemos un autobús cada hora y media para llegar a Madrid”, afirma Ángel Díaz, agricultor jubilado de 78 años. Obligado por motivos de salud a vivir en una silla de ruedas, tiene que ir tres veces por semana hasta Arganda del Rey para hacer la diálisis en el que es el hospital más cercano. “Viene una ambulancia a llevarlo, se siente importante”, bromean sus amigos.

No todos somos ricos como los futbolistas”

En los barrios más adinerados de Pozuelo de Alarcón nada es accesible a la gente que llega de fuera. Los colegios privados, rodeados de vallas y sistemas de seguridad, parecen más embajadas o cuarteles militares. El acceso a la mayoría de las vías, incluso las públicas, está restringido para los que no son vecinos. Y las urbanizaciones más exclusivas cuentan con puntos de control y guardias de seguridad. Ni siquiera los bares y restaurantes tienen terrazas a pie de calle: las mesas están protegidas por vallas y arbustos para garantizar la privacidad de los clientes, entre los cuales se pueden encontrar algunas de las personas más ricas de España.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (4)

“No todos somos ricos como los futbolistas”, precisa Paquita Galán (63 años), pensionista. Acaba de salir con su amiga Marisa (67) de un gimnasio en Somosaguas, el conjunto de urbanizaciones de Pozuelo que engloba algunas de las fincas más caras e inaccesibles de Madrid. Galán, que ha trabajado como funcionaria hasta prejubilarse, reconoce que la renta de su familia se ubica dentro la media de la ciudad (82.973 euros). “Pero no gracias a mi sueldo”, precisa, para después añadir que es gracias a su marido, “que trabaja de autónomo”.

Conforme uno avanza hacia el sur de la ciudad se puede percibir que la renta de los hogares es más alta. Aquí se encuentra La Finca, un terreno de la dimensión de 400 campos de fútbol que pasó de ser un espacio natural al que acudían los vecinos de Pozuelo a uno de los lugares más blindados del país. Entre sus vecinos se encuentran deportistas de élite, celebridades y empresarios, dispuestos a pagar hasta 17 millones por sus propiedades.

Hay muy poco movimiento en los alrededores de la urbanización. Los únicos vehículos que entran son las furgonetas de alguna empresa de limpieza o arreglo de piscinas, mientras que los que salen son coches de alta gama que van a toda velocidad. En un parque municipal vallado, Dante (51 años) pasea los perros de la familia para la cual trabaja como empleado del hogar. “Limpio, ordeno la casa y cuido los animales. Un poco de todo”, explica en un inglés defectuoso.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (5)

Es filipino y llegó a Madrid en 2018. Desde entonces trabaja de interno en una de las mansiones de La Finca, la urbanización más lujosa de Pozuelo, para una celebridad de la cual prefiere no revelar el nombre. “Mis jefes me tratan bien, son muy gentiles conmigo”, asegura, antes de volver a trabajar por “cerca de mil” euros al mes.

90 kilómetros y 60.000 euros de renta al año: la distancia entre Pozuelo y Brea, el municipio más pobre de Madrid (2024)
Top Articles
Latest Posts
Article information

Author: Msgr. Benton Quitzon

Last Updated:

Views: 6358

Rating: 4.2 / 5 (63 voted)

Reviews: 86% of readers found this page helpful

Author information

Name: Msgr. Benton Quitzon

Birthday: 2001-08-13

Address: 96487 Kris Cliff, Teresiafurt, WI 95201

Phone: +9418513585781

Job: Senior Designer

Hobby: Calligraphy, Rowing, Vacation, Geocaching, Web surfing, Electronics, Electronics

Introduction: My name is Msgr. Benton Quitzon, I am a comfortable, charming, thankful, happy, adventurous, handsome, precious person who loves writing and wants to share my knowledge and understanding with you.