Escribir una carta a un niño apadrinado | Ayuda en Acción (2024)

El apadrinamiento es una forma diferente e inolvidable de colaborar con la infancia más necesitada. ¿En qué consiste? Fundamentalmente, un niño, niña o grupo de niños y niñas ejerce como portavoz para contarte lo que con tu ayuda se hace en la comunidad en la que viven. Una vez decides apadrinar, recibirás dos cartas al año de los niños y niñas apadrinados. Y tú, por supuesto, puedes escribirles. Es más, deberías hacerlo. ¿Por qué? Sigue leyendo y lo entenderás.

Las cartas de los padrinos a los niños apadrinados son muy importantes

Cuando apadrinas, comenzarás a ver la realidad de la comunidad a la que apoyas desde los ojos y las palabras de la infancia. Tendrás la foto del niño, niña o niños y niñas que apadrines, sabrás sus nombres, a qué escuela van, en qué curso están, cómo van sus estudios… Y por supuesto irás conociendo, carta a carta, a diferentes personas e instituciones de su comunidad. Verás cómo gracias al apadrinamiento un mundo diferente se abre ante sus ojos.

Sin embargo, ellos poco sabrán de ti a menos que les escribas. Piensa que la mayoría viven en comunidades rurales y en muchos casos aisladas o lejanas a grandes núcleos de población. Para ellos, recibir cartas supone todo un acontecimiento. Mucho más si vienen de lejos y de gente tan importante como quienes están ayudando a crear su futuro. Quizás no lo creas, pero cuando reciben carta es motivo de fiesta y de orgullo: la enseñan a sus familiares, a sus amigos y amigas del colegio… Guardan las cartas en el lugar más preciado.

Gracias a tu relato conocerán otro mundo, les inspirarás a cumplir sus sueños y algún día poder contarte que lo consiguieron con tu ayuda.

Si son niños de América Latina, además, puede que sea más fácil para ti puesto que compartimos el mismo idioma. Pero en caso de que sean niños de África, no hay problema en que escribas en castellano (aunque si te manejas en inglés, es mucho mejor hacerlo en dicho idioma) ya que tenemos un equipo para ayudar en la traducción de las cartas (y también puede apoyarte en la traducción cuando tú recibas las cartas por su parte). Solo tendrás que decírnoslo al mail que te facilitaremos como principal vía de comunicación.

¿Cómo escribir una carta a un niño apadrinado?

Es importante que conozcas algunos detalles como que en algunos países de América Latina es mejor usar la palabra amigo/a en lugar de padrino o madrina. Allí estas palabras tienen connotaciones culturales y legales vinculantes y su uso no sería bien comprendido por los niños y niñas y sus familias.

Algo que también es muy importante que tengas en cuenta la forma en la que escribes tu carta: intenta que la letra sea clara y los mensajes sencillos.

Así mismo, además de la carta también puedes mandar algún detalle siempre en formato papel y que no pese en exceso para evitar costes adicionales en aduana. Siempre aconsejamos que sean tarjetas postales o fotografías, porque así lo pueden compartir con su familia y amistades.

Cuando te hagas padrino o madrina te mandaremos un pack de bienvenida en el que te explicaremos cómo escribir a tu grupo, ya que debido a los problemas con el correo postal (sobre todo desde el inicio de la pandemia de COVID-19), también tienes posibilidad de que mandes tu carta a través de correo electrónico. En ningún caso tendrás la dirección exacta de la casa donde viven los niños y niñas, sino que las cartas se entregan desde nuestra oficina nacional en cada país. Allí las recibimos y realizamos todo el proceso de entrega con las familias en unas jornadas que se llaman de vínculo solidario.

Si tienes más dudas sobre cómo escribir una carta a un niño apadrinado, en el apartado de preguntas frecuentes de nuestra web podrás despejarlas todas.

¿Qué le debo contar?

Hay muchas cosas que puedes contar a los niños y niñas apadrinados. Quizás puedes empezar presentándote, diciéndole tu nombre, dónde vives y cómo es tu familia. Le puedes contar a qué te dedicas y contarle cómo es tu ciudad o tu comida favorita.

En sucesivas cartas, es muy importante que le cuentes lo feliz que estás cuando recibes su carta y lo orgulloso/a que te sientes de todos los avances que están consiguiendo en la comunidad.

Además, puedes hacerle preguntas con el objetivo de que mantengáis una correspondencia. Te dejamos algunas ideas:

• ¿Cómo es tu escuela? ¿Te gusta ir?


• ¿A qué se dedica la mayoría de la gente donde vives?


• ¿Qué animales hay en la comunidad?


• ¿Qué te gustaría ser cuando crezcas?

Pero también nos gustaría indicarte cosas que no debes incluir en tus cartas:

• Comentarios sobre cosas materiales o dinero, ya que que puedan frustrar a los niños y niñas que no pueden acceder a ellas.


• Asuntos relacionados con la religión o la política.

Ahora, si te animas a apadrinar, seguro que lo tienes todo más claro. Si aún así te surgen dudas, siempre podrás contactar con nosotros a través de nuestros canales de comunicación, donde te atenderemos de la forma más rápida posible.

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